SHIRIPUNO

 
 
 

Cuando el turismo beneficia a la comunidad, viajar es un acto generoso. Y cuando se suman prácticas sostenibles, la experiencia es aún más enriquecedora. Así es Shiripuno: una comunidad gobernada por mujeres empoderadas. Este complejo turístico -ubicado en Puerto Misahuallí, a 45 minutos del Tena- está construido sobre las bases de una historia admirable.

Soledad Chimbo, es una de sus lideresas. Recuerda cómo esta pequeña población kichwa se convirtió en una alternativa turística que acerca al viajero a la cosmovisión de los indígenas de la Amazonía ecuatoriana, a los conocimientos ancestrales del cuidado del medio ambiente y a los encantos de la selva.

Hace 14 años las mujeres de la comunidad se limitaban al cuidado de la casa. Eran los hombres los que “mantenían el hogar”. Shiripuno no tenía una fuente de ingresos fija.

Sin embargo, todo cambió cuando un grupo de mujeres – decidieron hacer historia y cambiar sus destinos y el de sus familias.

El proyecto empezó en el 2006. Teodoro Rivadeneira y su expareja Amelia Lema, encontraron un gran potencial: la fuerza femenina de la comunidad. Fue entonces cuando empezó el proceso para elevar el autoestima de las mujeres: les hablaron de amor propio y las hicieron involucrarse en la fuerza económica: las empoderaron.

Así nació la Asociación de Mujeres Kiwchas de Shiripuno Misahualli (Amukishmi, en kichwa) y con ella Shiripuno: Turismo Comunitario, que hoy cuenta con servicio de hospedaje, un comedor para alimentar a los turistas y varios tours por la selva, o dentro del recinto para conocer las tradiciones amazónicas. Las actividades incluyen un recorrido por la elaboración del cacao, la realización de la chicha de yuca, caminatas, danzas, pesca, shamanismo, entre otras.

Hoy en día, la asociación está a cargo de 80 familias, cerca de 200 personas entre niños y adultos. Cada cuatro años, la comunidad cambia de presidencia, y siempre este cargo es ocupado por una mujer.

Así, al visitar Shiripuno, el viajero se encontrará con la oportunidad de vivir de cerca un turismo comunitario que empodera y empoderará a las siguientes generaciones de mujeres que nacerán ahí, que crecerán con la verdad de que las mujeres pueden gobernar con éxito.